El Senado podrá votar este martes 12 el proyecto de ley que regula y grava las apuestas deportivas en Brasil. El PL ya estaba en la agenda de la votación del pleno, pero fue pospuesta por falta de acuerdo con la oposición, que acusa al gobierno de dar aprobación al juego en el país.

La urgencia de la votación fue aprobada a finales de noviembre, pero la mayoría de los senadores optó por esperar a una nueva sesión para un análisis final del tema. El aplazamiento contó con el apoyo de la base gubernamental.

Esta es una de las medidas que se tramita en el Congreso y que se considera fundamental para que el gobierno aumente los ingresos en 2024 y elimine el déficit de las cuentas públicas. El Ministerio de Hacienda espera recaudar 2 mil millones de reales el próximo año con la medida, pero es una estimación considerada conservadora.

El ministerio informó a principios de diciembre que más de 130 empresas habían expresado previamente su interés en autorizar las apuestas deportivas de cuota fija.

Las empresas que hayan presentado una manifestación de interés previa tendrán prioridad para las solicitudes de autorización, según informa Hacienda, "en cuanto se abra el plazo de recepción de solicitudes y pago de subvenciones".

Cómo funcionará la fiscalidad de las apuestas deportivas
La propuesta sufrió cambios en el Senado. El texto aprobado en la anterior Cámara incluía un impuesto del 18% sobre los ingresos brutos de las plataformas menos los premios pagados a los apostadores, los llamados GGR (ingresos brutos del juego, en sus siglas en inglés). El nuevo informe fija una tasa del 12%. El porcentaje se acerca al deseado por las empresas del sector de las apuestas.

También ha cambiado el reparto de la cantidad recaudada. El nuevo dictamen define:

• 10% al Ministerio de Educación;
   
• el 14% para el área de seguridad pública, como el Fondo Nacional de Seguridad Pública (FNSP) y el Sistema Integrado de Monitoreo de Fronteras (Sisfron);
   
• el 36% para el área deportiva, como el Ministerio de Deportes y comités deportivos;
   
• 10% para seguridad social;
   
• 28% para el sector turístico, como la Agencia Brasileña de Promoción Turística Internacional (Embratur) y el Ministerio de Turismo;
   
• 1% para el Ministerio de Salud;
   
• 0,50% para entidades de la sociedad civil, como las Asociaciones de Padres y Amigos de Excepcionales (Fenapaes), la Federación Nacional de Asociaciones Pestalozzi (Fenapestalozzi) y la Cruz Roja Brasileña;
   
• y 0,50% al Fondo para el Equipamiento y Operacionalización de Actividades Básicas de la Policía Federal (Funapol).
  
   

El texto también exige que las apuestas extranjeras tengan al menos el 20% del capital en manos de una empresa brasileña. El proyecto también define una subvención inicial para autorizar a los sitios a operar legalmente, de R$ 30 millones, por cinco años.

En el caso de la tributación de los premios recibidos por los apostadores, se redujo el tipo del 30% al 15%. Este cargo se producirá una vez al año. Los montos inferiores a la tabla de exención del IR, actualmente R$ 2.112, no estarán sujetos a impuestos.